Pareja mismo Eneatipo

Una pregunta recurrente que me suelen hacer durante los cursos y conferencias que imparto sobre eneagrama es si nos conviene o no tener una pareja de nuestro mismo eneatipo. En primer lugar, la respuesta a esta pregunta no es tan obvia, no creo que se pueda responder con un simple sí o no. Para ser objetivos, tenemos que analizar los pros y contras que puede tener una relación de pareja con una persona de tu mismo tipo de personalidad.

Antes de nada, quiero recalcar que lo que va a ayudar a que una relación de pareja vaya bien, no es solamente el Eneatipo. El eneatipo te da mucha información sobre cómo va a ser la relación, pero no te lo dice todo sobre la persona. También es importante analizar su temperamento, sus tendencias instintivas, su sistema de creencias, sus valores y sus objetivos.

Conozco a personas del mismo Eneatipo felizmente casados y con hijos. También conozco a parejas que tienen el mismo eneatipo pero con diferente subtipo, y eso ya les ayuda a compensarse y complementarse mucho mejor.

Lo positivo que van a tener dos personas que tienen el mismo tipo de personalidad es que se van a comprender bastante bien. Inicialmente, puede ocurrir lo contrario, que te parezca extraño ver tus defectos proyectados en el otro. Pero con el paso del tiempo, tendrás un alto nivel de comprensión mutua al entender mejor que nadie sus miedos, inseguridades, debilidades y por tener una forma similar de ver la vida.

Por ejemplo, dos Eneatipo 1 van a ver la vida en términos de perfección, llevar una vida bien estructurada, tomar decisiones con sentido común, etc. Conozco una pareja de unos que ella es una amiga mía de toda la vida 1 Conservación, y su marido es 1 Transmisor. Se organizan genial con los niños, la casa, se gestionan perfectamente los tiempos… Son un equipo impecable.

También, una pareja de mismo Eneatipo es una oportunidad de ayuda mutua, te va a ayudar a conocer muchas cosas de ti porque vas a ver reflejado en el otro los defectos, las virtudes, los talentos y las inteligencias que tú también tienes.

Imagínate que eres un Eneatipo 2 y empiezas a salir con otro 2 que a lo mejor ha superado más sus dependencias emocionales siendo más independiente y humilde. Pues puedes aprender de ella a superar tus propios talones de Aquiles.

Como hemos visto, estar con una persona de tu mismo Eneatipo supone tener los mismos defectos y punto ciego. Por ejemplo, dos Eneatipo 3 juntos, podrían tener bloqueos emocionales por no hablar claro de esas cosas que les da miedo o quieren ocultar, como que uno quiera cambiar de ciudad y el otro no, pero no dirán las cosas claras y se quedarán esperando a ver qué pasa. O dos Eneatipo 6 que uno empieza a pensar mal del otro y al otro también le entra el escepticismo.

Otra cuestión es que podría haber menos experiencia vital. Cuando estás con una persona que tiene un tipo de personalidad diferente al tuyo, aunque vaya a haber dificultades a la hora de adaptarte a su forma de ver la vida, también va a ser una fuente de crecimiento y aprendizaje.

Por ejemplo, mi mujer es 7 y su forma de ver la vida me enriquece y ayuda. Muchas veces se va a su flecha al 1 y me da una visión objetiva y clara de las cosas cuando dudo o tengo un poco de confusión a la hora de cómo tomar decisiones. Las cosas positivas que tiene el 7 me ayudan a compensar mis rayadas de 6.

En todo caso, cualquier combinación de eneatipos puede tener sus pros y sus contras. Lo importante muchas veces más que el Eneatipo, es compartir unos valores y objetivos de vida similares.